El proceso de reconversión del zoológico porteño en un Ecoparque comenzó en el 2016. Tras una discusión en la Legislatura, prosperó una ley que le dio marco al proyecto.
Sin embargo, un año después, el proceso está recibiendo duras críticas. Desde la Fundación Ambiente y Recursos Naturales (FARN) sostienen que estamos en “un momento de crisis” debido a que “ha habido cambios internos y deserciones en la gente encargada del proceso y del decreto reglamentario”.
“Hay varias urgencias y problemas a atender”, aseguró Ana Di Pangracio, Directora Ejecutiva Adjunta de FARN. “Se ha presentado un plan de trabajo para los próximos años. Es a tres décadas, pero sin objetivos concretos a corto, mediano y largo plazo. Solo se hace hincapié en la cuestión paisajística, no en las urgencias relativas a la fauna y al bienestar animal”, denunció en diálogo con “Urbanos” por Radio ArinfoPlay.
Desde la ONG también plantearon que el plan, que hoy está a cargo del ministerio de Modernización porteño, debiera estar en una dependencia más especializada. También recomendaron escuchar los aportes de las organizaciones de la sociedad civil que trabajan la temática.
Más de 300 animales del ex zoo porteño ya fueron trasladados, 500 hoy están sueltos y 500 en recintos. Desde FARN pidieron hacer un análisis de corto plazo de la situación de cada uno para evaluar su calidad de vida, detectar cuáles pueden ser trasladados a un mejor lugar y también para mejorar los recintos de los que se tienen que quedar. “Tras muchos años de abandono, la institución no presenta las mejores condiciones edilicias. Es un tema de urgencia a atender”, recalcó Di Pangracio.
La Directora Ejecutiva Adjunta de FARN también hizo hincapié en la importancia de tener cuidadores capacitados y una correcta atención veterinaria. “Hoy hay fallas: no está bien coordinada la labor de la gente que trabaja para el zoo”, afirmó.
Asimismo, comentó: “Las autoridades han informado la falta de un presupuesto ajustado para atender los trabajos y las tareas que necesitan llevar adelante. No hay suficientes recursos humanos y financieros”.
“Hemos hechos críticas constructivas al proceso: las urgencias no se han atendido en tiempo y forma. Parece que las autoridades no toman nota porque los problemas persisten, cuando ya podrían haberse solucionado. No logramos encontrar un interlocutor que acoja las recomendaciones que les damos. Parece que es gente que habla un idioma distinto y que entiende que lo que está haciendo es lo correcto. No advierten las urgencias en las que decimos que hay que trabajar”, manifestó Di Pangracio desde los micrófono de Radio ArinfoPlay.
Y, finalmente, señaló: “Es un sitio con mucho potencial como espacio verde, como lugar de educación ambiental, de investigación científica y de conservación de la biodiversidad. Esperemos que no se deje pasar la oportunidad”.
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