martes, 26 de mayo de 2015

Piden por la sanción de una Ley nacional de ascensores

Ante el vacío legal existente a nivel nacional, desde la Federación de Asociaciones y Cámaras de Ascensores de la República Argentina (FACARA) trabajan para que se sancione una ley de alcance nacional en materia de ascensores.

“Si bien hay ciudades que cuentan con ordenanzas o normativas, no hay una unificación. La ley busca garantizar la igualdad para todo el país. Hoy no hay alcance de normativas en algunos lugares del interior y no hay departamentos de control. Entonces, allí, la empresa instala y luego no hay más responsabilidades”, planteó Fernando Suárez, Presidente de FACARA.

El proyecto de ley incluye todo lo relacionado a la fabricación, instalación, control y seguimiento de los ascensores. También hace referencia al cumplimiento de Normas técnicas del Mercosur e IRAM. Además, prevé garantizar la accesibilidad de personas con movilidad reducida y que los ascensores puedan ser operados por no videntes a partir de la colocación teclas en braille e indicadores sonoros.

“Un ascensor correctamente mantenido es completamente seguro. Los controles pugnan por que no ocurran anomalías. También hay que instalar de acuerdo a normas. La federación persigue la seguridad”, aseguró Suárez, a la vez que recalcó que la aprobación de la norma no afecta económicamente al sector de la construcción.

En ese marco, el dirigente del sector se mostró muy ilusionado con que el proyecto avance en los próximos meses en el Congreso nacional, donde ha sido impulsado por el senador Eugenio “Nito” Artaza. Aún resta que la iniciativa pase por dos comisiones y desde FACARA esperan que pueda ser aprobado “antes de fin de año”.

En diálogo con “Urba-NOS” por Radio ArinfoPlay, Suárez explicó que no hay una estadística cierta sobre las causas de accidentes en ascensores en la Argentina, aunque graficó que estos pueden ser por “problemas de mantenimiento, problemas de diseño, mal uso o abuso”, entre otras causas.

Hoy, están permutando datos entre cámaras para tener un mejor panorama de las causas de accidentes. Además, FACARA tiene un Consejo de Seguridad que dicta resoluciones y consejos de uso. Así lograron que, por ejemplo, se coloquen stickers para que el usuario verifique siempre la presencia de la cabina antes de abrir la puerta.

“En Mar del Plata, por ejemplo, los edificios nuevos deben tener ascensores con pesadores de carga, puerta ciega, alarma autónoma, doble luz de cabina y luz de emergencia. Son pequeños detalles pero, por ejemplo, una muy buena iluminación de cabina evita que el usuario quiera abrir la puerta sin mirar si está. Ampliar las mirillas de las puertas también sería conveniente”, sostuvo el dirigente.

FACARA también está impartiendo cursos en escuelas primarias para uso de ascensores ya que los chicos son los más vulnerables en caso de accidentes. “Antes las puertas tijera ocasionaban el llamado ‘pie de ascensor’ o sacaban la mano. Hubo muchos casos de accidentes, pero la técnica ayuda a eliminar esos problemas. Hoy hay pesadores de carga que, si uno quiere, los puede ajustar a un mínimo para impedir que viajen chicos solos”, precisó Suárez desde los micrófonos de Radio ArinfoPlay.

El Presidente de la Cámara indicó que en la cabina de un ascensor debe figurar la capacidad máxima, los consejos de seguridad y el número de teléfono de emergencias de la empresa que realiza el mantenimiento.

Y, finalmente, comentó qué hacer en caso de que se detenga un ascensor: “Ha habido accidentes por abandonar la cabina ante el detenimiento. El usuario piensa que salta a un pasillo pero, si se agarra de la cabina, el cuerpo hace efecto de péndulo y cae al vacío. Es peligrosísimo hacer eso. Los consejos de seguridad que se ponen adentro de la cabina parecen tontos, pero salvan vidas. En esos casos, hay que permanecer en la cabina y tocar el botón de alarma. Dentro de la cabina es un espacio seguro”.

viernes, 22 de mayo de 2015

Alertan sobre el crecimiento de peatones tecnológicos

Con motivo del día de la seguridad del peatón del pasado 19 de marzo, el Observatorio Vial Latinoamericano (OVILAM) realizó un estudio para observar la conducta de movimiento, sobre todo en el cruce de calles, del peatón de la Ciudad de Buenos Aires.

El dato más saliente de este informe, si se lo compara con mismo estudio realizado en 2014, es que creció el número de “peatones tecnológicos”, que son aquellos que cruzan la calle hablando por teléfono, mandado mensajes de texto o escuchando música o radio a través de auriculares.

“Con esas conductas afectamos los dos sentidos más importantes para la circulación, que son la vista y el oído. Eso está generando gran cantidad de siniestros no solo en Argentina, sino a nivel mundial, junto a otras conductas que tiene el peatón a la hora de cruzar la calle”, advirtió el Ing. Fabián Pons, Presidente de OVILAM.

El especialista explicó que, por año, mueren más de 1.300.000 personas a nivel mundial en siniestros viales y en su gran mayoría son peatones. En grades ciudades como Buenos Aires, París, Londres o Madrid, aproximadamente entre un 30 y un 50% de los fallecidos son peatones porque son el ser más vulnerable.

En la Ciudad de Buenos Aires, el 2014 fue el primer año en que los siniestros de motociclistas y la cantidad de muertos fueron mayores que los de peatones. Hasta ese momento, siempre encabezaban e ranking los peatones por negligencias propias o de los automovilistas que los atropellan.

“La tecnología es algo que llegó para quedarse, no va a volver para atrás. El tema es cómo hacemos para contrarrestarlo y disminuir sus consecuencias. Se va a tener que trabajar mucho con concientización o educación”, sostuvo Pons en diálogo con “Urba-NOS” por Radio ArinfoPlay.

Como recomendación para evitar accidentes, planteó: “Hay que educar y hacer tomar conciencia de los riesgos que implica cruzar la calle sin utilizar los sentidos más importantes. La recomendación es que, al momento de cruzar, se saquen los auriculares, no hablen por teléfono ni manden mensajes de texto. Que esperen para hacer eso en un lugar donde estén quietos o protegidos. Que lo hagan en la ochava, por ejemplo, y no cruzando”

El Presidente del OVLIAM contó también que, a partir de datos suministrados por el sistema ferroviario, se comprobó que una gran parte de la gente que es atropellada es por cruzar las vías hablando por teléfono o con auriculares. “Están abstraídos y no escuchan el ruido o las bocinas del tren”, lamentó.

“Vemos cotidianamente que el uso del celular es una de las grandes distracciones del automovilistas. La gente que trabaja con motos ya tiene formas para adherir los teléfonos adentro de los cascos. Es un fenómeno al que no se debe combatir, porque sería inútil. Lo que hay que hacer es moderar los efectos negativos y tratar de aumenta los positivos. Las ciudades se jactan de tener cada vez mayor conectividad y eso es mostrado como un logro, pero los efectos colaterales y dañinos son las distracciones que genera usar esa tecnología para cruzar una calle, por ejemplo”, reflexionó el Ingeniero.

Al ser consultado sobre una eventual sanción a peatones tecnológicos con multas, respondió: “Hubo proyectos en Europa que no prosperaron. Sería complicado implementarlo. Hay que hacer más hincapié en la concientización y la educación”.

Finalmente, Pons afirmó desde los micrófonos de Radio ArinfoPlay que la concientización sobre este tema es algo que no está en la agenda política: “No se muestran los efectos nocivos de la conectividad con sus distracciones. A estas siempre se las vincula al automovilista y no al peatón. Escudado en que tiene prioridad de paso y en que es el ser más débil dentro del tránsito, este se pone en riesgo”.

martes, 19 de mayo de 2015

Piden que el Zoo de Buenos Aires se convierta en un Jardín Ecológico

Durante la última Feria del Libro se realizó una actividad en la cual se presentó públicamente el proyecto de reconversión del zoológico de la agrupación denominada SinZoo. Se trata de una iniciativa que ya tiene estado parlamentario en la Legislatura porteña y que ha logrado el respaldo de nueve Legisladores. El Diputado Adrián Camps del Partido Socialista Auténtico lo firmó, pero también tiene adhesiones de bloques como el Frente Para la Victoria, el Frente Renovador, la Coalición Cívica y Verde al Sur.

“Esperamos que en el 2015 podamos tener el debate serio en la Legislatura del que nos vimos privados en el 2012, cuando el zoológico se remató por decreto. Queremos que también se discuta la cuestión de fondo, que no es qué clase de zoo queremos, sino para qué queremos un zoo en el siglo XXI”, planteó el Dr. Gerardo Biglia, integrante del grupo SinZoo.

El abogado explicó que el proyecto que ya está en la Legislatura propone “terminar con el modelo victoriano de dominación y conquista que son los zoológicos tradicionales y, a su vez, convertirlo en un lugar que funcione como un lugar educativo, reconvertido en un centro de recuperación, rehabilitación y reinserción de fauna autóctona en el cual no exista exhibición de animales como objeto de entretenimiento”.

“La idea es aprovechar el potencial y el caudal de ese espacio, y comenzar a utilizarlo de manera tal que devuelva a los animales parte de lo que durante más de un siglo se les arrebató, que es la vida y la libertad”, destacó en diálogo con “Urba-NOS” por Radio ArinfoPlay.

Respecto a los fundamentos de la iniciativa, el Dr. Biglia expresó: “La exhibición es una de las principales causas de estrés de los animales. Estos muchas veces son arrancados de su hábitat y son objetos de tráfico ilegal. Mucho peor es cuando se justifica diciendo que nacieron en cautiverio, porque de esa manera se entiende que los están reproduciendo con el único objetivo de exhibirlos. Esta idea atrasa, es algo que hacían los conquistadores. Después de muchos siglos, seguimos con la misma lógica. A eso le sumamos una cuestión muy perversa que hay detrás de los zoo, que es que están apuntados a un público infantil. El mensaje que le transmitimos a un chico cuando le mostramos un elefante en un recinto es que está bien utilizar y servirnos de la vida y de la libertad de otro para nuestro propio entretenimiento, que los animales pueden ser usados como instrumentos para satisfacer nuestros fines, aún cuando estos sean tan básicos como el esparcimiento. Nadie aprende nada yendo a un zoo. El zoo nos muestra las ruinas de lo que el animal alguna vez fue”.

“El proyecto de reconversión es una forma de recuperar un espacio público que hoy la Ciudad tiene concesionado a un privado. Se puede ser un paseo educativo, sin necesidad de exhibir animales y, con el auxilio de las nuevas tecnologías, le puede contar a un chico cómo se recupera, rehabilita y se libera un animal de fauna autóctona”, agregó el especialista.

Respecto al tema de la fauna autóctona, el abogado precisó: “Hay un problema de tráfico muy grande en Argentina. Miles de individuos de distintas especies son decomisados todos los años en operativos y, en la mayoría de los casos, no hay lugar para que reciban una atención temprana que permita una posterior liberación y reinserción. En Argentina hay muchas especies propias con amenazas graves y leves de extinción, pero en lugar de protegerlas destinamos recursos a entretenimiento y a exhibición circense de animales cautivos”.

El pasado 29 de abril, el Gobierno de la Ciudad presentó su propio proyecto de renovación del zoológico de Buenos Aires. Sobre este anuncio, el integrante de SinZoo opinó: “Esa reforma plantea solo que no haya especies exóticas. Quisieron hacer un anuncio con motivo del día del animal y lo que terminaron ratificando fue su idea que, por el momento, es mantener el mismo modelo: un pseudo-parque de entretenimientos. No hay ninguna diferencia ética si lo que mantengo cautivo es fauna autóctona o exótica. Hoy hablan de reducir ‘la colección’ a 2 mil individuos, de los 3 mil existentes. Es una lavada de cara enmarcada en una estrategia de marketing político. Si la intención fuera verdadera, habría que presentar un programa en el ámbito de la Legislatura y abrirlo al debate. Esto no está abierto al intercambio. De todas maneras, me alegro que desde el oficialismo se hable de la cuestión y se deje de invisibilizar el tema”.

La iniciativa de SinZoo contempla también la recuperación y preservación del patrimonio arquitectónico de las edificaciones del predio, teniendo en cuenta que se trata de un Monumento Histórico Nacional y de un Patrimonio Cultural de la Ciudad. Además, se exige la intangibilidad laboral de los trabajadores actuales.

En esa línea, se busca hacer un censo de animales que hoy están en el zoo y terminar con las actividades circenses dentro de él, como las del acuario, algo que está prohibido en la Ciudad por ley desde el año 2004.

“Todo esto forma parte de tendencia. En disantos lugares se vienen cerrando los zoológicos. Ya pasó en Santiago del Estero, Bahía Blanca, Colón, Rawson y hay un proceso similar en Montevideo, Uruguay. En una sociedad con los niveles de violencia como la nuestra, no debería sorprender la forma en que nos vinculamos con los animales. Tal como están las cosas no pueden seguir”, finalizó el Dr. Biglia desde los micrófonos de Radio ArinfoPlay.

viernes, 15 de mayo de 2015

Vecinos de Caballito, contra la construcción de una torre en el Club Italiano

Vecinos de Caballito denuncian que una parte del Club Italiano será demolido para construir allí una torre de 25 pisos. Aseguran que se trata un emprendimiento destinado a la “especulación”, que solo causará un impacto negativo en la zona.

“Estamos preocupadísimos por la demolición del patrimonio cultural, social y arquitectónico. Se trata de un edificio bellísimo, que tiene una historia vinculada a la colectividad italiana y a los espectáculos. Los vecinos y socios del club estamos aterrados. Esto es contra lo que pelamos hace años, pero seguiremos adelante”, dijo Mario Oybin, integrante de la agrupación ‘S.O.S. Caballito’.

Desde la organización vecinal confirmaron que la Dirección General de Interpretación Urbanística (DGIUR) habilitó la construcción en el predio del Club Italiano de un edificio de entre 20 y25 pisos, con salida sobre la calle Campichuelo y con FOT de la Avenida Rivadavia.

“Se trata de un edificio de 25 pisos en una zona ya colapsada. Esto está solo animado por la especulación inmobiliaria. Son tipos al servicio del sector financiero que buscan armar ‘cuchitriles’, optimizando la tasa de ganancia y afectando a los vecinos, quitándoles el sol y aumentando colapso del barrio. Esto debería ser impedido desde el Gobierno de la Ciudad, pero en realidad hay connivencia”, sostuvo Oybin en diálogo con “Urba-NOS” por Radio ArinfoPlay.

En esa línea, aseguró que hay miembros de la Comisión Directiva del Club vinculados a inmobiliarias que, bajo la fachada de intentar salvar al club, “dilapidan y rematan una parte de él”. “Es gente que busca hacer su negocio”, acusó.

“A la ofensiva de la especulación inmobiliaria no le importan los patrimonios ni la cultura ni la arquitectura, solo busca su negocio. En este caso, tiene la colaboración de la Comisión Directiva y hasta de algunos socios”, agregó.

En esa línea, el integrante de ‘S.O.S Caballito reiteró sus reclamos hacia el Gobierno porteño: “Cuando las instituciones gubernamentales están al servicio de un negocio espurio, lo único que le queda a los vecinos es presentar recursos de amparo, con el consiguiente costo que eso implica para trabajadores que ven demolido el barrio que eligieron para vivir o el club del que forman parte. No sabemos cómo va a terminar esto, pero tenemos una tradición de pelea es defensa de la calidad de vida y vamos a seguir con esa mecánica ya que tenemos algunos éxitos en nuestro haber en los últimos ocho años como el haber preservado la casa de Clelia Podestá de 1864, que ahora será un museo”.

Finalmente, Oybin comentó que ante sus denuncias no se han acercado dirigentes del PRO ni de la oposición porteña y que tampoco se han contactado dirigentes de la colectividad italiana.

“Somos vecinos de Buenos Aires que elegimos un barrio para crecer y desarrollar nuestra familia. Los vecinos de la zona de Caballito son los que están llevando adelante la pelea y que presentarán recurso de amparo ante la amenaza del Gobierno de la Ciudad de responder con juicios, como ya lo hicieron con otras organizaciones. Esto se ha transformado en un boomerang”, finalizó el vecino de Caballito desde los micrófonos deRadio ArinfoPlay.

jueves, 14 de mayo de 2015

Original proyecto para oxigenar el agua del Lago Lugano

Hace pocos días, se instaló en el Lago Lugano de la Ciudad de Buenos Aires, que es parte de la cuenca Matanza-Riachuelo, la primera isla artificial que funciona a energía solas y que ayudará a oxigenar los márgenes, con el fin de ayudar al saneamiento.

“Se trata de una isla artificial que está flotando en el agua y que recibe la energía solar a través de un panel. Esta se convierte en energía eléctrica y se la lleva a una bomba, que toma el agua a unos 60 centímetros de profundidad. La bomba arroja el agua hacia afuera por medio de un aspersor y así se riega. Ese contacto con el aire, se devuelve el oxigeno al agua y, a la vez, al caer el agua en la superficie esta se hace más turbulenta. Donde más se busca ese efecto es en las costas del lago, que es donde hay mayores problemas de oxigenación”, explicó el Arquitecto Sebastian Zanetti, inventor de la isla flotante.

Este dispositivo no acumula energía, sino que funciona siempre y cuando haya sol. Es decir, se acciona de día y se apaga de noche. Esto es automático con la salida del sol: no se necesita que alguien lo prenda o apague. Tampoco necesita baterías, que es un elemento contaminante para el agua y que también requiere mantenimiento. Además, una batería tendría mayor costo podría sobreexigir a la bomba.

“Esta una configuración distinta: no se trata de una obra de infraestructura que se debe construir in situ, sino que son dispositivos autónomos e independientes, a los cuales se puede ubicar donde se quiera. Incluso, se los puede usar durante un tiempo determinado en un lugar y luego se los puede llevar a otro. Hoy hay uno solo funcionando, pero la idea es hacer más. El objetivo es ver resultados en corto plazo”, planteó Zanetti en diálogo con“Urba-NOS” por Radio ArinfoPlay. 

Esta iniciativa se implemento en conjunto con la Agencia de Protección Ambiental de la Ciudad (APRA). Zanetti ganó un concurso organizado por el organismo, luego lo desarrolló e implementó. Recientemente, la isla fue exhibida también en la Expo Biosustentable.

“El objetivo ahora es limitar el espacio del lago para ver los resultados en un plazo corto y hacer la documentación que permita escalarlo y sacar datos reales. El lago tiene 500 metros de diámetro y una forma circular, su mayor problema es en las orillas. Entonces, hay que pensar en términos de perímetro. La intención a futuro es poner unas diez islas y comenzar a tomar mediciones. Probablemente estas se moverán periódicamente”, señaló el desarrollador del dispositivo, quien anticipó que, dependiendo de los resultados, es probable que se lo lleve a otros lagos de la Ciudad.

Asimismo, comentó: “Ya hay otros proyectos de oxigenación de agua. Este sistema es como el de la pecera o de un acuario. Los proyectos previos a gran escala previos incluían cascadas artificiales, algo que se va a hacer en el Riachuelo. La idea, en este caso, es alimentarlo a través de energía solar”.

“Yo, en un principio, había pensado este sistema para el Riachuelo, por lo que tenía forma de boya, más compacta. Cuando se la llevó al Lago Lugano, se lo pensó como isla artificial. La gente de ‘Colectando sol’ colaboró con las articulaciones para permitir que se eleve la isla junto a las crecidas de agua y con la parte técnica del armado del panel y la bomba. Ahora tiene un anclaje que le permite desplazarse en forma horizontal, sin que el panel pierda su orientación hacia el Norte para recibir el sol”, destacó Zanetti.

Finalmente, el arquitecto concluyó desde los micrófonos de Radio ArinfoPlay: “La idea es sumar. Quizá esto no es lo único que se puede hacer porque hay otras complejidades a tener en cuenta en el saneamiento de algo tan contaminado como el Riachuelo, pero la idea es sumar”.

viernes, 8 de mayo de 2015

Centro de Arqueología Urbana: reconstrucción de una Buenos Aires perdida


El Centro de Arqueología Urbana (CAU), dependiente de la Facultad de Arquitectura de la UBA, se dedica a reconstruir la vida cotidiana de los porteños de siglos pasados, a partir de la recuperación de objetos de aquellas épocas.

“Nuestro trabajo es excavar la Ciudad y tratar de explicar el pasado, no solo a través de papeles o fotos, sino a través de los restos materiales, de lo que encontramos cuando excavamos. Siempre es interesante conocer la historia de Buenos Aires, no por la historia en sí misma, sino para explicarnos porqué la ciudad es como es y por qué no es de otra manera”, sostuvo el Arq. Daniel Schavelzon, Director del CAU e investigador del Conicet. 

El CAU obtiene sus materiales de trabajo a partir de los restos de edificios demolidos y de la basura de la vida doméstica que se halla entre los escombros. 

“La gente comió, tomó, tiró la botella, tiró los huesos del asado…Son las cosas que hacemos todos los días. Creemos que, porque sacamos la basura, esta desapareció y, en realidad no es así. Va a otro lado y, si la estudiamos, podemos entender qué se comía, qué se bebía, cómo se actuaba y cómo se comportaba la gente en cada etapa. A veces no es lo que nos contaron y ahí está lo interesante”, destacó el titular del CAU en diálogo con “Urba-NOS” por Radio ArinfoPlay.

Respecto al objetivo de este trabajo, precisó: “Lo que más nos interesa de Buenos Aires es la vida doméstica. Los argentinos hemos tenido una enorme propensión a hacer historia de los héroes, de los señores arriba del caballo o de los políticos. No es que ellos no se merezcan que se escriban muchos libros pero, en general, ha habido un olvido importante de las costumbres, de las formas de vida, de las tradiciones. En fin, de lo cotidiano, de lo habitual, de la gente de todos los días, que es algo fascinante”. 

Schavelzon contó que existe una obligación en la Ciudad de denunciar hallazgos o cosas que se encuentran. “Es bárbaro pero, si no se hace, no pasa nada. En la cruda realidad cotidiana, se hace agua la obligación”, lamentó el profesional. 

“Para nosotros, lo más importantes el centro histórico, la zona de San Telmo. No porque lo más viejo sea lo más importante, sino porque es lo más chiquito, lo más endeble y lo que más se destruye. Cuando se construye un edificio, la excavación se lleva todo lo de abajo, con lo cual se pierde todo ese conocimiento potencial que podríamos hacer. El área donde mayor movimiento y construcción hay es el centro, ya que los barrios se transforman mucho más lentamente, y eso coincide con la parte más antigua de la Ciudad: se pierden más siglos de historia en un edificio del centro que en cualquier otro lugar de la Ciudad”, explicó el Director del CAU. 

Al ser consultado sobre cómo se comportan las empresas constructoras cuando la entidad se acerca para pedir revisar la excavación, el arquitecto comentó: “Hay una actitud dual. Cuando se habla con la gente de las obras y se les explica que encontraron algo histórico y que queremos sacarlo, generalmente siempre dicen que sí y no hay problemas. Pero hay un mito en la Ciudad de que no hay que avisar que encontraste algo porque te van a parar la obra, lo cual es absurdo”. 

“Nosotros pedimos que, durante la obra, nos dejen trabajar de manera razonable. Cuando comenzamos, el edificio ya está destruido y está perdido el patrimonio que estaba arriba del suelo. Lo ideal sería conservar todo. Pero, en el caso que se demuela un edificio, necesitamos sacar lo de abajo”, agregó. 

Finalmente, Schavelzon dijo a Radio ArinfoPlay que los hallazgos más interesantes se hacen por aviso de los ciudadanos de a pie: “Generalmente es un vecino que se asoma por la ventana, nos llama y nos dice lo que está viendo en la obra de al lado. Ojalá nos sigan informando y contando, aún cuando se equivoquen”.

martes, 5 de mayo de 2015

La UOCRA abrió el un concurso de diseño para su obra institucional

El gremio de la UOCRA (Construcción), a través de su Red Social, ha abierto la convocatoria para el concurso de diseño de una obra artística para reconocimiento institucional. La propuesta se basa en la creación de una pieza escultórica. Esto con anterioridad se había encargado a diseñadores reconocidos y es la primera vez que la organización decide llamar a concurso.

“Es una propuesta muy amplia, orientada al público en general. Los participantes deben ser mayores de 18 años y puede ser diseñadores, arquitectos o no tener carrera universitaria, simplemente alcanza con la curiosidad creativa y las ganas de participar”, dijo la Lic. Alejandra Hurwitz, integrante de la Red Social UOCRA, al programa “Urba-NOS” en Radio ArinfoPlay.

Respecto a las pautas que debe cumplir la pieza escultórica, precisó: “Lo importante es que el diseño logre transmitir los ejes humanitarios de la red social, que son la solidaridad, la unión, la pertenencia y la dignidad en el trabajo. Será lo que más se tendrá en cuenta a la hora de evaluar a la obra. Estos ejes deben estar presentes de modo concreto o abstracto, como cada uno lo pueda transmitir”.

La convocatoria para enviar los diseños (dibujos o proyectos) cierra el 31 de julio de 2015. Se realizará una pre-selección de unas diez piezas y recién allí se pedirá a los elegidos que envíen la pieza. El ganador se conocerá en septiembre.

Habrá premios muy importantes. El primer puesto se llevará 20 mil pesos y el segundo, 10 mil. Además, habrá tres menciones especiales.

Los ganadores serán seleccionados por un jurado compuesto por tres personas notables. Uno de ellos será Miguel Jurado, del suplemento de arquitectura del diario Clarín, también estará la viceministra de Trabajo de la Nación, Noemí Rial, y habrá un tercer integrante a definir.

“Apelamos a la creatividad de la gente. Queremos ver qué tienen para ofrecer. Tenemos en cuenta al trabajador y a cualquiera que quiera participar que tenga propuesta y que tal vez no tiene un ámbito donde expresarse”, destacó Hurwitz desde los micrófonos de Radio ArinfoPlay.

Finalmente, recalcó: “La pieza elegida llegará a altas esferas y tendrá un prestigio enorme. Llegará, por ejemplo, al papa Francisco y a personalidades del mundo artístico, cultural y laboral de la Argentina y del mundo. Tendrá un nivel de trascendencia altísimo. Para un artista no hay nada más lindo que su obra sea reconocida”.