“Se deben instalar criterios de transporte público de calidad”

En los últimos años, los gobiernos han puesto en práctica diversas medidas con el objetivo de lograr que el transporte público funcione de manera más fluida y que se convierta en una verdadera opción para que los ciudadanos abandonen los autos particulares.

Pedro Del Piero Presidente de la Fundación Metropolitana, analizó algunas de estas políticas y manifestó propuestas con el objetivo de lograr una mejora en los desplazamientos en el AMBA (Área Metropolitana de Buenos Aires).

En primer término, habló sobre los Metrobus que se habilitaron en la Ciudad de Buenos Aires, como los de la Avenida Juan B. Justo y 9 de Julio: “Por ahora, ordenó el desplazamiento en la Ciudad, pero no en el AMBA. Ojalá llegue el día en que este sistema corra sobre autopistas y se haga cargo del flujo de los viajes largos, que son los troncales. Hoy, gran parte de esos vecinos, vienen en autos y generan los embotellamientos de la mañana y la noche”.

“Un Metrobus en serio, para mediana distancia, debe tener colectivos más grandes, ticketeada al entrar a la dársena y pocas paradas. Además, debe ayudar a un flujo metropolitano”, sostuvo en diálogo con “Urba-NOS” por Radio ArinfoPlay.

Aún así, Del Piero recalcó: “El Metrobus está demostrando que dar carriles exclusivos al transporte público, con la comodidad de tener paradas bien establecidas y dársenas altas, es bueno”.

“Políticas como el Metrobus son avances. Es bienvenido que se instalen criterios de transporte público de calidad, porque no da más la situación del tráfico en el área metropolitana”, planteó y recomendó implementar estos sistemas en corredores como el de la Ruta 3.

Al ser consultado sobre los logros de la implementación de la tarjeta SUBE para el pago del boleto, el Presidente de la Fundación Metropolitana opinó: “Vino a dar una ayuda importante en materia de medio de pago extendido, aunque aún no ha dado todo el resultado que hace falta”.

“Lo que sí permite es tener en tiempo real la información que se necesita para planificar los servicios de transporte público. De dónde va la gente y con qué destino es un dato básico que aporta la tarjeta”, destacó.

En relación a la reciente inauguración de la Autopista Illia, expresó: “No hay dudas de que es una mejora. Por fin han aparecido coincidencias entre poderes de jurisdicciones distintas, como Ciudad y Nación. Se pusieron de acuerdo a favor de la gente para darle una solución a la salida de la Ciudad”.

“Estas políticas en conjunto son escenarios que los gobernantes deberían advertir como ganador-ganador. Los que las ejecutan, obtienen el reconocimiento. De todas maneras, creo que es algo que tiene más que ver con una especulación de coyuntura electoral pero, mientras tanto, es bueno que ocurra. Lo metropolitano necesita cooperación, inevitablemente”, afirmó Del Piero.

Finalmente, celebró el acuerdo entre Ciudad y Nación para instalar autopista Ribereña. El experto calificó a este anunció como una “muy buena noticia” y precisó que será la conexión de la autopista Buenos Aires - La Plata y 25 de Mayo con la Illia.

“Hay una conciencia de cooperación entre los gobernantes, pero no de manera sistemática. Son ejemplos de buenas prácticas que no alcanzan a estructurar una planificación de escala a nivel metropolitano. Hay que desarrollar conciencia a nivel ciudadano para reclamar estas cuestiones”, concluyó desde los micrófonos de Radio ArinfoPlay.

Encargados de edificios se comprometen con el medio ambiente

Recientemente, el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires anunció que ya son tres mil los edificios que separan sus residuos en origen, colaborando con el cuidado del medio ambiente. En esta tarea, los encargados juegan un rol fundamental.

“Actualmente, el 8% de edificios de propiedad horizontal de la Ciudad tiene algún programa de separación de residuos, promocionado e impulsado desde el Gobierno porteño. Nosotros decimos que, si se trata de una tarea permanente, constante y de largo plazo, contarán con todo el apoyo de los trabajadores y del sindicato. Entendemos que son programas que van a servir para mejorar la calidad de vida de los que vivimos aquí y que están relacionados con la preservación del ambiente en una ciudad tan grande y superpoblada”, sostuvo Víctor Santa María, Secretario General del SUTERH.

El dirigente aseguró que otra preocupación en materia ambiental es el del agua: “Lamentablemente, en los edificios aún no hay mucha conciencia sobre su uso y, a quienes trabajan allí que son los encargados, aún les cuesta llevar adelante un cambio de cultura relacionado al uso racional del agua para evitar un derroche sin sentido”.

“El agua potable es un bien escaso y no renovable. Hay que tomar conciencia de eso. Nosotros, como sindicato les llevamos ese mensaje a los trabajadores, pero también debe hacerlo a la gente que vive en los edificios. Debe ser una tarea conjunta”, agregó en diálogo con “Urba-NOS” por Radio ArinfoPlay.

Santa María, quien también preside Partido Justicialista de la Ciudad, expresó su opinión respecto al comportamiento de los porteños en relación al cuidado del medio ambiente: “Desde mi punto de vista, la conciencia no es tan rápida como debería ser. Los cambios en relación al ambiente son culturales y llevan tiempo. Cada día que no pone en práctica algo o que no se educa, es tiempo que se pierde en tratar de cambiar los patrones culturales”.

“Le expresamos a las autoridades del Gobierno de la Ciudad que queremos trabajar en cambios que se mantengan y que se sostengan en el tiempo, sea quien sea quien esté gobernando”, recalcó.

Finalmente, el secretario general del SUTERH hizo referencia desde los micrófonos de Radio ArinfoPlay a la entrega de botones antipánico a los encargados de edificio.

“Primero lo hicimos en conjunto con el Gobierno Nacional en Recoleta y Caballito. Ahora, con el Gobierno de la Ciudad en las Comunas 2, 4 y 13. Es algo que da la posibilidad a los trabajadores de edificios de trabajar solidariamente con quienes viven allí para tener mayor seguridad”, afirmó.

La Legislatura contó con una particular intervención artística

Durante el fin de semana del 14 y 15 de junio, el artista plástico Daniel Taccone realizó una muy celebrada intervención en el frente de la Legislatura porteña.

Taccone, quien viene realizando este tipo de trabajos desde el año 2009, fue convocado por la Directora de Cultura de la Legislatura, Patricia Malanca, quien había visto sus antecedentes por la página de Youtube.

“Me dieron la posibilidad de expresarme libremente para intervenir el edificio y el piso sobre la calle Perú. Sin embargo, al ser una propiedad histórica, no puede pintar sobre las paredes y tuve que colocar unas telas sobre ellas. El motivo de esta actividad era promocionar el salón de exposiciones en el Palacio”, contó el artista.

El trabajo que realizó en la Legislatura recibió el nombre de “Un sueño de libertad”. El objetivo de la obra fue que fuera efímera, es decir, que se borrara a los pocos días. Las telas que estaban en las paredes fueron subidas y están en exhibición dentro del edificio.

“Usé la técnica de anamorfosis. Esta consiste en la transformación de las imágenes, en deformar para poder apreciar. Se originó en el 1500 y la usaban los pintores para poner mensajes ocultos en sus pinturas. Julian Beever lo implementó en el arte urbano hace ya varios años. Lo que me atrapó de esta técnica es que el espectador es parte de la obra, se involucra y participa. Es una forma muy linda de acercar el arte a la gente. Esa es mi intención”, dijo Taccone al programa “Urba-NOS” en Radio ArinfoPlay.

Asimismo, agregó: “La anamorfosis aún es algo poco usado. No es lo mismo que el 3D, que es como pintar un cuadro con luces, sombras, esfumado y perspectiva. En la anamorfosis, en cambio, se trabaja con un punto de vista y una altura. Se coloca un trípode con una cámara y los espectadores observan el efecto de realismo”.

“En la Legislatura, como había poco lugar para apreciar, hice un punto dentro del mural marcado con un semicírculo violeta y otro punto en la vereda de enfrente, para que se pueda apreciar el efecto. La idea era que se viera desde los pisos altos de los edificios de alrededor. Finalmente, logré que con la cámara de un celular común y corriente se pudiera apreciar el efecto. Si se adiestra el ojo, también se ve a simple vista, ya que se hizo con pintura y no con tiza”, destacó.

El también docente de Arte señaló desde los micrófonos de Radio ArinfoPlay que el desafío más grande fue trabajar sobre el empedrado: “Cada bloque es una deformación en particular de la línea. Yo no uso pinceles de artística, sino que pinto con pincel de pintor, de brocha gorda, para agregarle dificultad. Ese es un desafío para mí mismo”.

“Como en todos mis trabajos, traté de transmitir un mensaje a la gente. Un mensaje de unión, de paz y de libertad. Mi idea es unir a la gente a través del arte. Yo pinto desde el alma”, concluyó.

Vecinos de Caballito, contra la construcción de una nueva torre

Los vecinos del barrio porteño de Caballito han manifestado su preocupación ante el anuncio de que próximamente podría comenzar una nueva obra en construcción de gran magnitud en la zona. El proyecto incluiría la construcción de una torre de 70 metros frente al Parque Rivadavia, en un terreno perteneciente al Club Italiano.

“El Club Italiano es una construcción maravillosa, que ha sido castigada en los últimos años. A esta situación se llega por los negocios de la Comisión Directiva, que no solo concesionó todo el frente sino que, hace unos años y luego de un raro incendio en los fondos, posibilitó que le retiraran la protección arquitectónica al edificio. A partir de eso, comenzaron a trabajar afanosamente para ver cómo podían entregar esos terrenos y ahora encontraron los caminos para intentar armar una torre con ingreso por la calle Campichuelo, donde el Código no se los permite”, contó Mario Oybin, miembro de la organización “S.O.S Caballito”.

El vecino dijo que se trata de un lugar muy preciado y que la construcción de una torre “alterará el espíritu arquitectónico del club y de la zona, y afectará también el ambiente”.

“Detrás del intento de sostener económicamente al club, están dilapidando sus bienes. Si se cambia la fisonomía del frente y luego se entregan terrenos de atrás, es indudable que hay un interés en el negocio. Es un club de mucho valor”, agregó Oybin en diálogo con “Urba-NOS” por Radio ArinfoPlay.

Desde “S.O.S Caballito” aseguraron que el barrio ya es una “zona colapsada”, por lo que no debería habilitarse una obra de estas magnitudes. “Los vecinos de los terrenos linderos reclaman que no se haga la torre porque va a quitar sol y va a afectar seriamente su calidad de vida”, plantearon.

En ese marco, Oybin apuntó contra las empresas constructoras y también contra la Dirección general de Registros de Obras y Catastros por las habilitaciones que realiza. Anticipó que evalúan presentar un amparo desde la organización por la construcción de esta torre.

“La especulación inmobiliaria está haciendo añicos nuestra ciudad. En el tema de la construcción se deposita gran parte del dinero negro de manera rentable y por eso el jolgorio sigue. Solo les interesa el negocio. Construyen cajas de zapatos apiladas sin ninguna belleza estética. Se han destruido casas hermosas para hacer cosas deleznables. Son tropelías. Eso no es progreso: progreso es calidad de vida, luz, sol y relación con los vecinos”, recalcó.

Asimismo, manifestó: “Esta es una ciudad maravillosa, con una arquitectura que habría que rescatar y defender pero, en los últimos años, le están pasando con una aplanadora por encima. Si la no han hecho más añicos es porque los vecinos de todos los barios nos hemos opuesto y hemos defendido el lugar que elegimos para vivir con nuestros hijos. En realidad, la Ciudad debería ser defendida por los políticos que la dirigen”.

“Los vecinos hemos desplegado una actividad muy grande defendiendo la calidad de vida, el patrimonio arquitectónico y la identidad de nuestros barrios. Es una lucha muy dura, pero venimos teniendo éxitos impensables desde el 2006 hasta acá. Hoy hay otro escenario en la Ciudad y eso tiene que ver con la movilización de los vecinos”, concluyó en diálogo con Radio ArinfoPlay.

Avanzan las obras de restauración del Parque Lezama

Hace ya unas semanas que se vienen realizando obras de puesta en valor en el tradicional Parque Lezama de la Ciudad de Buenos Aires. Los trabajos se demoraron en comenzar por diversas polémicas que surgieron en torno al proyecto presentado desde el Poder Ejecutivo y a las distintas visiones de las organizaciones vecinales de la zona.

“La puesta en valor de Parque Lezama viene muy bien. Se decidió hacer la obra por partes para no cerrar el parque completo, ya que diariamente lo usan los vecinos y gente que trabaja en la zona durante la semana. Es por eso que, como máximo, habrá dos sectores en obra al mismo tiempo. Se tardará un poco más, pero es importante que no se cierre el parque completo” planteó Patricio Di Stéfano, subsecretario de uso del espacio público de la Ciudad.

El funcionario anticipó que la obra “será larga” y que, aunque hubo mucha polémica en la previa, el objetivo principal es que “los trabajos concluyan bien y el parque esté lindo”.

“Este es un trabajo de restauración. Hay que ser muy meticulosos y cuidadosos porque el parque está declarado monumento histórico y hay que respetar eso en materia de ordenamiento, mobiliario, bancos, luces, los árboles de muchos años y la traza de caminos”, explicó.

Di Stéfano precisó que, en esta etapa de la obra, no está incluida la colocación de una reja perimetral. Ese fue uno de los puntos de discusión con las organizaciones vecinales.

“Veremos con el correr del tiempo cómo se mantiene el parque y cuál es el estado de vandalismo. Estas obras cuestan mucho a todos los contribuyentes y, muchas veces, se vienen abajo por falta de seguridad y vandalismo. La gente que lo usa también tiene responsabilidad de tratarlo bien. Queremos ver cómo se desarrolla la utilización hasta tomar una decisión pero, en esta etapa de la obra, la reja no está contemplada”, recalcó en diálogo con “Urba-NOS” por Radio ArinfoPlay.

Para poner un fin al contrapunto por las rejas, el subsecretario recordó que “el parque originalmente estaba enrejado” y aseguró que la mayoría de los vecinos del barrio estaban de acuerdo con su colocación, pero que hubo una minoría que se opuso “para que en la madrugada el parque esté abierto”.

Otra de las cuestiones que enero entredichos fue que el proyecto del Poder Ejecutivo contempló la destrucción del anfiteatro del parque, para construir allí una fuente. Respecto a esta determinación, Di Stéfano puntualizó: “Originalmente, ese lugar era una fuente con un jardín. Por ley, tenemos que arreglarlo tal cual fue construido. Ahí no puede haber un playón. Los argumentos de los que se oponen no tienen sustento”.

“El Parque Lezama es muy importante. En el Casco Histórico están la Plaza de Mayo, Retiro y este. Es una traza original y son los tres parques históricos. Es muy relevante para la zona Sur”, destacó.

Finalmente, el funcionario comentó a Radio ArinfoPlay que esta obra es parte de un plan integral para toda la zona del Casco Histórico: “Estamos haciendo un esfuerzo grande por tener toda la zona en óptimas condiciones para el año que viene. Es una zona que es parte de la identidad de los porteños y por muchos años no se invirtió allí. Se fue ocupando, se fueron desarrollando actividades que lo degradan, como la venta ilegal, y pretendemos ordenarlo. Trabajaremos en las veredas, en la iluminación y ya hemos puesto los contenedores negros para la basura”

“El Casco Histórico y San Telmo son la cara de la Ciudad y tienen que estar en condiciones. Con todas estas obras, la idea es que el año que viene pueda estar así”, concluyó.

“Hay que eliminar la interferencia de pasos a nivel de vías con la Ciudad”

En los últimos días, el ministro del Interior y Transporte, Florencio Randazzo, anunció la llegada de nuevas formaciones para el ferrocarril Sarmiento, las cuales se sumarían a las que ya están en funcionamiento en la línea. 

Esto trajo algunas críticas por parte de los habitantes de la Ciudad de Buenos Aires, quienes argumentaron que una mayor cantidad de trenes acarrearía mayor tiempo de espera en las barreras y caos de tránsito.

“Después de la tragedia de Once se anunciaron obras de emergencia. Hubo un verdadero colapso del servicio y la cantidad de trenes disminuyó mucho. Incluso, durante mucho tiempo los domingos no hubo servicio. Hoy, la cantidad de trenes es mucho menor que la que había antes. Normalmente, el Sarmiento tenía unos 10 trenes por hora en cada vía y pasaba un tren cada seis minutos. Si la cantidad de formaciones que se van a poner ahora son las mismas que estaban antes del accidente, está bien. Quizás nos hemos malacostumbrado a que haya menos”, analizó Juan Pablo Martínez, especialista en Ingeniería Ferroviaria.

El experto consideró que las barreras son “un problema con el que la Ciudad siempre convivió” y apuntó que eso es “algo que va a tener que afrontar hasta que no se hagan las obras necesarias para resolverlo”.

“Hay que eliminar la interferencia de los pasos a nivel de las vías con la Ciudad y eso se puede hacer dos maneras: una es metiendo el ferrocarril elevado o bajo tierra y la otra es hacer pasar las calles por arriba o por abajo. A partir de ahí, se abren las posibilidades. Durante las gestiones de Jorge Telerman y Mauricio Macri en la Ciudad se realizaron casi 20 obras llamadas ‘sapitos’ para paso de automóviles por debajo de las vías y esa es una solución muy efectiva”, planteó el Ingeniero.

Martínez dijo que el sector que se puede ver, por ejemplo, en las calles Bulnes, Salguero o Medrano, donde el tráfico pasa por arriba del ferrocarril y el tren circula bajo tierra pero a cielo abierto con cuatro vías, se construyó entre los años 1903 y 1906, con un “proyecto de ingeniería de primer nivel y con mucho dinero detrás”.

“Ese tipo de obras son muy caras. Lamentablemente, después de la Primera Guerra Mundial, los ferrocarriles comenzaron a tener problemas económicos. Luego, llegaron los camiones que casi los fundieron y, posteriormente, llegó la nacionalización. El estado no supo qué hacer en 40 años y por eso estamos en esta situación. Hay que buscar soluciones técnicas”, destacó el experto en diálogo con“Urba-NOS” por Radio ArinfoPlay.

El Ingeniero acusó a los gobernantes de “venderle demagógicamente” a los vecinos la “fantasía” del corredor verde: “Ellos sueñan con tener una plaza lineal llena de árboles y pájaros y se olvidan del ferrocarril, porque creen que va a ir a 30 metros de profundidad, pero un accidente a esa profundidad sería terrible”.

“De todas maneras, el soterramiento es lo mejor, a condición de que se haga bien. Esto significa que se construya con cuatro vías en todo el trayecto, como hoy hay desde Once hasta Caballito y de Liniers a Haedo, para que pueda haber trenes rápidos. Pero el proyecto es una herencia de la gestión de Jaime y plantea dos vías, como el subte, sin trenes rápidos. Los intentes de Morón, Merlo, Moreno, etcétera, deben saber que, si se hace de esa manera, nunca habrá trenes rápidos desde sus localidades a Once”, alertó.

En ese marco, precisó: “Un tren a diesel lleva varios miles de litros de combustible. Imagínese un percance en un túnel a 20 metros de profundidad. Esos trenes no pueden ir por ese túnel. Los vecinos, los intendentes y las comunidades más alejadas deben tener noción de que nunca tendrán tren llegando directo a Once si se hace de esa manera”.

“Jaime no tuvo en cuenta todas estas cosas, pero el actual ministro sabe esto y está buscando la mejor manera de resolver el problema. Si se va a seguir con el proyecto de los túneles, creo que también hay que mantener las dos vías a nivel. Pueden coexistir las dos cosas: el tren eléctrico abajo y arriba los trenes rápidos o con locomotoras diesel. Nación y Ciudad deben sentarse a ver el proyecto”, concluyó Martínez desde los micrófonos de Radio ArinfoPlay.

Críticas al proyecto de desafectación del predio lindero a la reserva

En los últimos días el oficialismo porteño ha presentado en la Legislatura dos iniciativas con el fin de desafectar un predio lindero a la reserva ecológica de Costanera Sur, con el fin de instalar allí una base de recolección de residuos sólidos úrbanos.

“Eso significará que va a haber camiones constantemente y almacenamiento de diverso material recuperado que, según su volumen, será necesario acopiar”, preció Ana Di Pangracio, directora ejecutiva adjunta de la Fundación Ambiente y Recursos Naturales (FARN).

Desde la organización ambientalista criticaron este proyecto y lo calificaron como un retroceso. Asimismo, afirmaron que es una iniciativa que “colisiona con los fines de un área protegida y con los objetivos del plan de manejo” de la reserva. Por el contrario, propusieron integrar ese predio a la misma.

“La reserva ecológica es una zona muy valiosa en el marco de una ciudad que adolece de suficientes espacios verdes. Incluso, hace poco, el Gobierno porteño anunció que, para los próximos 20 años, su objetivo es aumentar sustancialmente el número de espacios verdes. Pocos después, anunciaron este proyecto que implica un retroceso y que colisiona con la norma máxima de la Ciudad, la Constitución, que ordena preservar e incrementar los espacios verdes y la biodiversidad. La idea también choca con otros principios esenciales del derecho ambiental”, recalcó Di Pangracio en diálogo con “Urba-NOS” por Radio ArinfoPlay.

Desde FARN ya harán un pedido de acceso a información pública para obtener copias de los proyectos presentados con el objetivo de tener en claro la ubicación exacta del predio y las dimensiones del mismo.

“Existe una deficiencia no solo en la Ciudad de Buenos Aires, sino también en las grandes ciudades. No hay suficientes espacios verdes y este tipo de medidas no solo no crean nuevos, sino que hacen que no se preserven los existentes. Además, la reserva es valiosa por sus humedales, es decir, sus cuerpos de agua, que son protegidos por convenios internacionales. Es por eso que nosotros no solo creemos que hay una plena responsabilidad de la Ciudad, sino que también de la secretaria de Ambiente y Desarrollo Sustentable de la Nación, que es quien debe implementar el Convenio Ramsar. Reclamamos que, ante una amenaza, también se meta la Nación para salir en defensa de la reserva”, exigió la directora ejecutiva de la organización ambientalista.

Di Pangracio dijo que, aunque la reserva de la Costanera Sur sirve para la recreación de la agente y para la educación ambiental,  “primero debe ser una reserva natural y hay que preservarla como tal”.

“Nosotros ya presentamos un pedido de informes porque nos preocupó que la alambraran, que incorporaran aparatos para hacer gimnasia, que ensancharan los senderos en detrimentos de los árboles o que las lagunas que se restauraron no tuvieran mantenimiento para despejarlas de vegetación. Son todas cosas que colisionan con el objetivo del lugar y su plan de manejo, por eso siempre hay que estar en alerta”, planteó desde los micrófonos de Radio ArinfoPlay.

FARN es una entidad que suele hacer hincapié en la necesidad de tener un mayor control en la reserva ecológica con el fin disuadir intrusiones o la presencia perros cimarrones, que atentan contra la fauna del lugar. También para cuidar al lugar en materia de residuos e incendios.

En el caso del proyecto de desafectación, celebraron que otras organizaciones se hayan sumado a las críticas para poder actuar en conjunto. También contaron que solo unos pocos legisladores, como Pablo Bergel o Alejandro Bodart, se pronunciaron en contra.

“Apuntamos a que se deseche el proyecto y que se opte por otro espacio más ajustado para lidiar con la problemática de la basura, que es una de las más grandes a nivel ambiental. Se necesita cooperación de Provincia y de Nación en esta materia. La idea es que en este tipo de iniciativas se participe a la gente, es decir, que se consulte a la sociedad civil para no generar enfado y enriquecer las decisiones que se toman”, concluyó Di Pangracio.